Los efectos van desde la misma conformación del ahorro pensional, hasta las implicaciones del pago de las pensiones por parte del Estado.
Desde el rendimiento que puedan tener los aportes pensionales gestionados por las administradoras de pensiones y cesantías (AFP), hasta los efectos tributarios y fiscales que representa para el Estado el compromiso con los pensionados por el régimen público, dependen de cómo le vaya al país en materia económica.
Para abordar este tema es necesario diferenciar entre los regímenes existentes en el sistema pensional colombiano: el de ahorro individual, administrado por fondos privados, o el de prima media, administrado por la estatal Colpensiones.
EN EL RÉGIMEN DE AHORRO INDIVIDUAL
Al estar afiliados a una administradora de fondos de pensiones y cesantías (AFP), los colombianos pueden escoger de qué manera se invierten los aportes que se hacen para su ahorro pensional, ya sea para buscar una mayor rentabilidad o para buscar mayor estabilidad en los recursos que constituirán su ingreso durante la vejez. Las tres opciones que ofrecen las AFP son el fondo conservador, el fondo moderado y el fondo de mayor riesgo.
En pocas palabras, a mayor cercanía a la edad de pensión se recomiendan inversiones estables, de bajo riesgo, como los títulos de deuda pública, es decir inversiones sobre todo en renta fija, como las que maneja un fondo conservador. Del otro lado, a menor edad, lo que permite tener un horizonte de tiempo mayor, se recomiendan inversiones en activos más riesgosos que tienen mayor rentabilidad y que, en caso de pérdidas a corto plazo, tengan el tiempo necesario para recuperar lo perdido y generar ganancias. Este tipo de inversiones se dan en parte importante en acciones, renta variable, que tienen representan un mayor parte dentro del fondo de mayor riesgo.
De acuerdo con Julián Cárdenas, analista de portafolios especiales de Protección, las AFP son conscientes de estas condiciones para determinar la composición de los diferentes multifondos y así lograr la mayor rentabilidad y estabilidad posible.
Según Cárdenas, el contexto económico del país en sus diferentes momentos es fundamental dentro del análisis que lleva a las decisiones de inversión.
“Hay algo que en economía funciona como un reloj, son los ciclos económicos. La economía no siempre crece a su mayor potencial y tampoco siempre está en desaceleración. En la economía hay ciclos, hay momentos de contracción y desaceleración, luego hay una fase de recuperación, de auge, de crecimiento mayor, luego de nuevo viene la desaceleración. No necesariamente cumplen con alguna periodicidad específica, pero la experiencia nos ha dicho que por lo general se cumplen esos ciclos. Entonces, los ciclos económicos determinan si es momento interesante para invertir en activos de riesgo o no. Si las tasas de interés están en un nivel muy alto y se espera una reducción, podría ser un momento interesante para activos más seguros, por ejemplo”, explica Cárdenas.
Como ejemplo Cárdenas utiliza la crisis del 2008. “Los ciclos económicos y las variables de la economía son fundamentales para determinar qué rumbo pueden tener las inversiones. Por ejemplo, la crisis financiera de 2008, se veía una desaceleración clarísima, no había confianza en los inversionistas ni en los consumidores. Eso terminó en que muchos salieron de sus inversiones de mayor riesgo, como las acciones, y buscaron refugio en los activos más seguros. En ese momento en Estados Unidos los títulos que se valorizaron fueron los más seguros”, argumentó.
“En el caso colombiano, a pesar de que hoy tenemos un ambiente pesimista en la economía, las inversiones nos están diciendo que las cosas van a empezar a cambiar eventualmente en el 2018 y por eso las acciones están subiendo desde ya”, asegura el analista.
Queda claro entonces que si a la economía le va bien, a las inversiones que se hacen con el ahorro pensional de los colombianos también les va bien. Así mismo que cuando el mercado de valores tiene un buen momento por la valorización de las acciones, a los portafolios que tienen un mayor componente de renta variable también les va bien. En este escenario le va bien también a los portafolios que tienen un menor componente invertido en acciones, porque igual reciben parte de las ganancias aunque en menor medida.
EN EL RÉGIMEN DE PRIMA MEDIA
A diferencia del régimen de ahorro individual, donde el dinero de los aportes pensionales es gestionado por las AFP en busca de rentabilidad y asumiendo algún nivel de riesgo, en el régimen de prima media, o público, no se hace ningún movimiento con el dinero que hace parte del ahorro pensional de los colombianos. Ese ahorro está ahí, fijo, y crece en la medida en que el empleador y el trabajador hacen sus respectivos aportes, así que el efecto positivo o negativo del entorno económico nacional no se siente en este aspecto.
Donde sí se siente la afectación de un momento de desaceleración económica del país, por ejemplo, es en el esfuerzo adicional que tiene que hacer el Estado en materia fiscal para poder pagar las obligaciones pensionales de este régimen.
En el Presupuesto General de la Nación para este año, se destinaron 38 billones de pesos al pago de pensiones. Esta cifra es cercana a 25% de los ingresos de la Nación, y para el presupuesto del próximo año se tienen destinados 41 billones de pesos. Con el pasivo pensional en aumento, adquiere todavía más importancia que las condiciones macroeconómicas del país sean positivas, que su inflación esté controlada, que la política monetaria vaya de acuerdo al momento que vive la economía local y que el crecimiento económico sea positivo y ojalá sostenido, para que la nación tenga ingresos suficientes para pagar las pensiones.
Julián Calderón H.
julcal@eltiempo.com
Fuente: Portafolio